Cambio de sentido a distinto nivel.
Siempre me ha hecho gracia este fuck you en toda regla. Será que es de las pocas cosas curiosas que te puedas encontrar en la monotonía de una autovía…
Pero, ¿es con este tipo de señales con el que queremos detener la sangría en las carreteras? No lo creo. Este fuckyounismo indiscriminado sólo hace que incitar a los conductores a pisar el acelerador con el fin de estar expuesto el mínimo tiempo posible a la señal, provocando el pertinente accidente.
Y no digamos cuando el ofendido conductor tenía pensado realizar el cambio de sentido (subliminalmente en la señal). No sólo tendría el accidente, sino que se saltaría el cambio de sentido debido a la brusca aceleración, produciéndose un doble fuck you.
Tal es el temor de los conductores a encontrarse con la maligna señal, que han optado por utilizar la técnica del «¿Ciclista? Que le den…«, haciéndose el longuis y apartando sus miradas del lado derecho de la carretera. Técnica bastante eficaz en las autovías, dado que no circulan ciclistas, pero que deviene en mortal en cuanto salen de éstas.
Conclusión: si no es por H es por B.
